HOMENAJE
A DAVID LYNCH
El hombre ¿nace o, entre todos, lo hacen?
Un asesino, por ejemplo, hay quien dice que es víctima de su entorno y otros,
en cambio, dirán que algo fallaba en su cerebro, o que era un cerdo sin
escrúpulos desde el mismo día en que nació.
Un escritor, ¿nace con su don o lo persigue
infatigablemente durante toda su vida? Es cierto, de todo habrá. Pero, ¿qué
tiene más valor, un tipo que explota sus habilidades al máximo, o aquel que
exprime sus posibilidades hasta reventar? ¿Es más reprobable el tirano genético,
o el otrora bienhechor reconvertido en poderoso déspota?
¿Quienes son más culpables, los que la
cagaron o los que no tiramos de la cadena?
No hay comentarios:
Publicar un comentario