UN HOMBRE FELIZ
Os lo prometo; cuando entré allí no tenía
ni idea de que el cartel rezaba 'solicita tu tarjeta de FIDELIDAD', así que,
sencillamente, me metí y, alzando la voz con garbo y alegría, vociferé:
"¡quiero mi tarjeta de FELICIDAD!".
No hay comentarios:
Publicar un comentario