No, no todo puede valer -ya ves, también en
esto estoy de acuerdo contigo-, pero, siendo sinceros, a quién le importan
realmente todas las explosiones que amenazan con derrumbar nuestro pequeño
paraíso particular; no creo que haya más de dos personas en el mundo con
derecho a opinar sobre esto, y una de ellas soy yo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario