CORRÍA HACIA LA CUMBRE; LO HACÍA A TODA
PRISA, PUEDE QUE DEMASIADA
Si yo fuera listo y quisiese alcanzar la
fama -que no el éxito- a toda velocidad, a cualquier precio, escribiría una
líneas incitando a la ciudadanía a esperar apostada a la puerta de ciertas
oficinas de la Calle Génova, o en Ferraz -qué más da-, y a que la emprendieran
a patadas con alguno de los muchos embusteros y traicioneros que viesen cruzar
sus puertas. Declararía incluso, mi firme deseo de estrechar las manos de
aquellos que más sangre ajena consiguieran derramar. Tendría miles, millones de
visitas en mi blog -entre otras las de algún que otro jurista estudiando si
debería mandarme a un calabozo-, sería conocido -aunque dudo que reconocido-;
pero claro, para que todo esto pasase, tendría yo que ser listo y desear
alcanzar la fama en tiempo récord, y una de estas dos condiciones, por
desgracia, en mi persona no se da.
No hay comentarios:
Publicar un comentario